Pilatos le preguntó: ¿No hay, pues, verdad sobre esta tierra?
Y Jesús dijo: Mira cómo los que manifiestan la verdad sobre la tierra son juzgados por los que tienen poder sobre la tierra.

miércoles, 29 de mayo de 2013

La manzana de la discordia


La cosa comenzó en la boda de la diosa Tetis con Peleo (los padres de Aquiles, el de los pies ligeros).

Éride, la diosa de la discordia, puso sobre la mesa una manzana dorada con la inscripcion: "para la mas bella".
En el banquete estaban Hera, Atenea y Afrodita.

Zeus decidió que actuase como juez Paris, hijo no reconocido del rey de Troya, que llevaba una vida sencilla de pastor y del que pensaron que entendía de estos asuntos y sería justo.

Hermes llevó el encargo a Paris, que hizo un aparte con las diosas una a una. Las examinó desnudas y negoció con ellas en los siguientes términos:

- Hera le prometió hacerle señor de toda Asia y el hombre mas rico del mundo.
- Atenea le prometió que sería el mas sabio y bello, y vencería en todas las batallas
- Finalmente Afrodita le prometió que le entregaría el amor de la mujer mas bella, Helena.

Paris entregó la manzana a Afrodita, quien cumplió su palabra. Pero claro, Helena estaba casada con el rey de Esparta y se lió la famosa guerra de Troya.

Dos consecuencias extraigo yo de este relato:

- Todos los personajes son muy mediterraneos. Las diosas son proclives al soborno y Paris no deja pasar la oportunidad para sacar tajada, y acepta la que es para él la mejor oferta.
- Pudiendo elegir el poder el honor y la riqueza, Paris opta por el sexo. Se queda con Helena, a quien solo conoce de oidas.

Así somos los latinos. Gente de trapicheos y corruptelas, y dispuestos a tirarlo todo por una mujer hermosa. 

Este relato ha atraido siempre a los artistas. Es un clásico y ofrece la oportunidad de representar a tres bellezas desnudas. Junto a estas lineas la interpretación de Rubens. Abajo un bajorrelieve representando la escena en el teatro romano de Sabrata (Libia).

Y en el encabezado la versión del genial Antonio Mingote, con las diosas orondas, y en el centro Paris con la manzana en la mano y estética de principios de SXX (con pajarita, zapatos blancos y sombrero canotier).



El juicio de Paris de Rubens

El juicio de Paris en el teatro romano de Sabrata


martes, 21 de mayo de 2013

Menta fresca

El olor de la menta es para mí el olor del pueblo. Mi madre tuvo siempre junto a la puerta de casa un tonel viejo de madera cortado por la mitad, reciclado en maceta, en el que crecia generosamente la menta.



De aquella planta tomé esquejes que he ido reproduciendo. El espécimen de la imagen es uno de ellos.

La menta es sobre todo, rústica. Crece en cualquier suelo medianamente sustancioso y no precisa apenas cuidados. Cuando empiece a espigarse (florecer) habrá que recortarla para que crezca durante algún tiempo más tupida y no se afee. Mejor que no le de demasiado sol. Y que no pase sed.

Forma un entramado de raices que llena el tiesto, y aunque pongamos solo un esqueje, si la vamos recortando tendrá muchos brotes. Los esquejes enraizan con mucha facilidad. Basta con cortar una punta de unos 10 cm. (cuando no está en flor) quitarle las hojas inferiores y ponerla en tierra muy húmeda. Garantizado. Renovaremos así la planta cuando envejezca al cabo de varios años.

En invierno, si el clima es severo, practicamente desaparece, pero brotará de nuevo a principios de primavera.

Como podemos recortarla sin miedo cuando la necesitemos, tenemos menta fresca siempre disponible. (Para el té, los mojitos, etc). Tambien podremos recortarla un par de veces al año y congelarla o ponerla a secar.
La distinción entre menta y hierbabuena es arbitraria. No hay tal distinción, salvo la que queramos convenir. Es una especie muy propensa a la hibridación y lo que vemos son híbridos. Según Font Quer la menta digamos auténtica o Mentha piperita procede de Mentha viridis y Mentha aquatica, cruzadas en el SXVII. Tambien según él, la planta de la foto sería una hierbabuena porque el rabillo de las hojas es mas corto.

Es irrelevante.

En la cocina árabe la menta o hierbabuena النعنع  tiene especial importancia. Ahí va un ejemplo.

PREPARACIÓN DEL TÉ MORUNO

En Marruecos suelen emplear el té verde, y primero lo escaldan con un chorrito de agua hirviendo, que revuelven en la tetera y lo tiran. Inmediatamente despues, con el té reblandecido y lavado, echan el agua hirviendo necesaria y le añaden un gran manojo de hierbabuena, tan grande, que a todos cuantos no conocen esta forma de prepararlo les parece cantidad excesiva. Pasados unos minutos lo endulzan con grandes trozos de azucar de pilón, fragmentado allí mismo con una macita de madera. A pesar de haber echado azucar en gran cantidad, cuando el moro responsable de la preparación de la bebida echa un chorrito en su vaso para catarlo, casi siempre acaba reconociendo que le falta el punto de dulzor... y echa mas azucar.
De manera que el secreto es este: té en cantidad suficiente, y enormes cantidades de hierbabuena recien colectada y de azúcar de primera calidad. 

miércoles, 15 de mayo de 2013

San Isidro Labrador


Nació en Madrid en 1081, de padres pobres y virtuosos, y se llamó Isidro de Merlo y Quintana. Casó con una doncella de Torrelaguna, María de la Cabeza, que le dio un hijo, después de cuyo nacimiento hicieron los esposos voto de vivir como hermano y hermana. Viéndose precisado a vivir por sus manos, entró a servir con Iván o Juan de Vargas. Era Isidro gran madrugador y visitaba varias iglesias antes de ir a su trabajo. Personas envidiosas de su virtud le acusaron ante el amo de no trabajar con la diligencia debida. Fue Juan de Vargas una mañana al predio y se encontró a su criado postrado en oración. Pero, cuando iba a reprenderle, vio que unos ángeles hacían por él el trabajo de arar el campo.

En vida y después de muerto obró milagros el santo patrón de Madrid. En un año de sequía hizo brotar una fuente, que sigue manando, junto a la ermita de su nombre. Extremadamente caritativo con las personas, lo era también con los animales. (Un día de una gran nevada dio de comer a los pájaros, vaciando el costal de trigo que llevaba a moler. Llegado al molino, todos pudieron ver que el costal estaba lleno. Estando otro día en la iglesia, fueron a avisarle de que un jumento iba a ser devorado por un lobo. Él siguió rezando y, al salir de la iglesia, vieron al burro paciendo y al lobo muerto a su lado. La esposa de tan gran santo se contagió del don de hacer milagros. En una ocasión, teniendo que cruzar el Jarama, que venía crecido, echó su mantilla sobre las revueltas aguas y pudo pasar a pie enjuto al otro lado.

Después de su muerte, acaecida el 15 de mayo de 1172, Isidro se apareció, en los fragores de Sierra Morena, al rey Alfonso VIII para mostrarle el camino, libre de enemigos, por el que llegar a las Navas de Tolosa. Siglos más tarde, habiendo caído enfermo Felipe III, a su regreso de Lisboa, en Casarrubios del Monte, fue llevado el cuerpo de Isidro al pueblo. Tan pronto como entró la caja en la regia estancia, quedó el monarca limpio de calentura y sanó milagrosamente. Tal fue siempre en Madrid la devoción a Isidro, que se le veneraba como santo desde mucho antes de ser siquiera beatificado.




 Es la página correspondiente al 15 de mayo de "El santoral de Luis_Carandell". Gran cronista parlamentario, recopilador de anécdotas de todo tipo ("Celtiberia show"), y un hombre capaz de explicarlo todo con una amenidad y una gracia irrepetibles.

Cuando leo algo suyo, me suena como leido con su voz.

En cuanto al santo que hoy conmemoramos, a resaltar que rezaba junto al ribazo mientras los angeles le labraban el campo.

No me parece a mí un sacrificio muy grande para alcanzar la santidad.

lunes, 13 de mayo de 2013

Papel moneda

Tuve la fortuna hace algún tiempo (no mucho), de hacer un recorrido por Libia. Digo fortuna porque ahora no es prudente ir, y puede que no lo sea en mucho tiempo, y Libia es un pais que vale la pena conocerlo.

Fue unas semanas antes de que se desencadenase la revolución que acabó con el régimen de Gadafi, en el contexto de lo que muchos llaman "la primavera árabe".

El "presidente" se refería a sí mismo como الاخ القائد  es decir "el hermano lider", y su imagen estaba presente por todas partes.
 
Billete de un dinar, con la imagen del mentado

Estamos muy acostumbrados a ver en el papel moneda imagenes de gobernantes que han salvado a sus respectivos pueblos de todos los males posibles, pero yo nunca había visto uno como este.

No es un primer plano, no lleva condecoraciones, no mira al horizonte. Se coloca un pañuelo grande sobre la cabeza de manera informal y se apoya la mano en la cara con gesto distendido. Encima sonrie. En plan colega, vamos.

Cuando viajo me gusta conservar algún billete de poco valor. En algunos paises, el papel moneda es una obra de arte y en el mundo árabe, a la belleza del diseño se une la de la caligrafía. Los billetes de Egipto son fantásticos. 

En España, tuvimos tambien billetes de los buenos. (¡Ah!, aquellas 1000 pesetas de los Reyes Católicos).

Ahora no. Los euros son estéticamente un asco.






domingo, 5 de mayo de 2013

Los arboles de mi calle

Vivo en una calle peatonal y no muy ancha. Hace algunos años, el ayuntamiento tuvo el buen criterio de poner varios ejemplares de Almez, "Celtis australis". Excelente elección.

Si bien hace años la situación era peor, todavía hoy podemos ver a las brigadas del servicio de jardinería plantando en ocasiones, especies inadecuadas en calles y parques.

Entre ellas los pinos. Dan mala sombra en verano, son sucios, la resina lo pringa todo. Crecen de forma desmedida y cuando los podan es peor. Unico punto en su haber, lo bien que resisten la sequía

Luego están los plátanos, propios de climas mas frecos. Que crecen demasiado y molestan en las ventanas, que sufren estrés hídrico en verano y pierden las hojas, y además son afectados por la antracnosis y el oidio y ocasionan alergias.

Por último está la moda de las especies exóticas, el Braquiquito, el Ginkgo, el jabonero de China  , etc. contra las que no tengo nada (incluso me gustan), pero me resultan "raras". Como un negro bailando sevillanas.

El Almez (Celtis australis), en catalán lledoner, es modesto y de buen conformar. No pide terrenos muy fértiles, ni un régimen de riego riguroso. Tolera bien los calores del verano mediterraneo dando una magnífica sombra. No crece desaforadamente levantando las aceras. Si molestan determinadas ramas, puede podarse sin problema. Pierde todas las hojas en otoño, pero lo hace en pocos días, con lo que el ensuciado de la calle es facilmente controlable. En invierno al no tener hojas, deja pasar la luz.

Todo ventajas.



Florece a principios de primavera, pero es dificil que reparemos en la flor. El fruto cuaja enseguida y es una pequeña baya redonda del tamaño de un guisante que en otoño se vuelve marrón.

Aquí está su principal inconveniente, porque entonces se llenará de palomas, mirlos, cotorras, y demás fauna urbana que viene a comerse los frutos y a defecarlos seguidamente.

Font Quer recomienda el cocimiento del fruto verde y las hojas para la disentería, y para regular en las mujeres el flujo menstrual demasiado abundante.